La pandemia orilló a un actor a repensar el poder del arte para discernir realidades, y el Ministerio de Cultura genera polémica por aprobar proyecto económico mientras distintos artistas no poseen beneficios ni ley que los ampare hasta el momento.
Todos los años en marzo, más de
300 jóvenes se reúnen en la explanada del Parque de la Exposición, para rendir
tres exámenes de admisión. Pasado este filtro, obtienen la ansiada vacante que
brinda la Escuela Nacional Superior de Arte Dramático (Ensad) para
convertirse en actores y actrices profesionales.
En 2011, Juan José de Los Santos
fue uno de los destacados en obtener una de las vacantes, según recalca. Con 23
años, la presión familiar y social lo hostigaban un poco.
“A los 10 años
ingresé a un grupo de teatro para aficionados en Rímac, creció y se convirtió
en una asociación cultural. Además, fue un objetivo a largo plazo, dirigir mi
propia agrupación una vez concluida la carrera. Escogí la Ensad, porque es
pública y la malla curricular me permitía obtener bachiller universitario con
mención en Actuación”, confiesa Juan.
En Perú, existen tres universidades que brindan la carrera de Artes Escénicas. La Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC), Pontificia Universidad Católica del Perú (Pucp) y la Universidad Científica del Sur (Ucsur). La Ensad, no está registrada como universidad, pero es la única escuela superior en el país que otorga el bachiller a nombre de la nación con mención en Actuación, según la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu).
El antes y el después
Inició el periodo de crisis sin
previo aviso en 2020 y para Juan fue una señal del destino. En su vida tocó
fondo varias ocasiones, pero esta vez, el enemigo era público. El Covid-19,
marcó un antes y un después en todos los objetivos a mediano y largo plazo.
El premio, otorga S/ 23 millones
a los proyectos que formen parte de las distintas ramas del arte: actores,
gestores, mediadores, productores, directores, autores, representantes y todos
los profesionales vinculados a las industrias culturales del país.
La iniciativa se establece en la Ley
N° 26370, Ley de Cinematografía Peruana y la Ley Nº 30879, Ley de Presupuesto
del Sector Público para el año fiscal 2019.
Dicho proyecto fue música para
los oídos de Juan, como actor egresado de la Ensad no le caería mal el apoyo,
sobre todo si viene del Estado. A base de esfuerzo, en 2018, Juanjo, más
conocido por su grupo de colegas y alumnos, fundó la “Agrupación Cultural
Seis Butacas”. Clases de teatro para todas las edades, shows con títeres,
expresión corporal, entre otros cursos con la intención de fomentar arte en el
distrito donde nació.
El Rímac, se convertiría en el
sueño que cumplió de niño, la meca del teatro con distintos tipos de público y
aunque la modalidad cambió de presencial a forma virtual, tenía una base o por
lo menos la experiencia como actor. No lo pensó más y tomó la decisión de
postular al proyecto del Mincul.
Sin embargo, las bases publicadas
por la entidad cultural empezaron a transformarse en obstáculos.
Obstáculo 1: La famosa
convocatoria, se resumía en un concurso, “gana el que se inscribe primero o el
que tenga un contacto directo para revisar la solicitud”, confiesa Juan.
Los mensajes de respuesta que
recibía de la coordinación fueron desalentadores, pero nada estaba dicho.
Obstáculo 2: La agrupación
o asociación que se inscriba en la convocatoria debe tener como mínimo seis
meses de estadía en un establecimiento propio. Una locura para Juanjo, la
realidad es que iba de local en local para conseguir más alumnos.
Obstáculo 3: Los aspirantes deben mantener durante todo el proceso de postulación, la condición de habido y activo ante la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (Sunat). Al no estar registrado en la entidad, imposible superar este filtro.
¿Cómo se llama la obra?
Primer acto:
Juan postuló más de dos veces de
manera individual al “Proyecto gestión de redes y/o plataformas digitales para
las artes escénicas, artes visuales”. También, con la agrupación “Seis
Butacas”, para el “Proyecto de propuestas artísticas como el circo, danza,
teatro, improvisación, mimo, narración oral, payaso, clown, magia, performance,
títere, espectáculos musicales u otras manifestaciones de las artes escénica”.
En ninguno tuvo éxito por no cumplir con algunas bases que escapan de la
realidad actual.
Existen distintos proyectos y
muchas oportunidades. Pero, ¿qué hace falta para conseguir el ansiado cupo?
Segundo acto:
En marzo de 2021, el Mincul
rechazó también el proyecto de Enrique Galdos, reconocido pintor de 87 años.
Nombrado por la misma cartera “Personalidad Meritoria de la Cultura”, con
Premio de Oro otorgado por la institución Bellas Artes. Postulaba con el “Proyecto
Talleres de pintura en Quechua y Lenguaje de señas”.
Su objetivo era fomentar la
inclusión y entregar los últimos años de su vida a la docencia. A pesar de ser
un artista con más 60 años de experiencia no logró obtener el apoyo económico
del Estado.
Tercer acto:
La indignación no se hizo
esperar, luego de conocer la premiación de S/ 75 mil que le otorgó el
Ministerio de Cultura a la actriz Mayra Couto, para la realización del piloto
de su primera miniserie “Mi cuerpa, mis reglas”. El proyecto de la artista,
recordada por pertenecer al elenco de la serie televisiva “Al fondo hay sitio”
dirigida por Efraín Aguilar, generó polémica en las redes sociales. Desde una
organización manipulada, hasta un buen juego de marketing por parte de los
dirigentes del Mincul.
La viceministra de Cultura,
Leslie Urteaga, conocida por estar involucrada en el escándalo de Richad Swing,
defendió dicho proyecto y también la entrega del dinero a la actriz.
“El premio en este caso forma parte de una política que ya está instalada en el ministerio desde el año 1996, que va dentro de La Ley del Cine. El sector cultura está incluido en la cadena productiva y retirar o tomar otra decisión sería perjudicial para la comunidad artística. Además, los apoyos económicos han sido una respuesta frente al contexto Covid-19”, sostuvo en una entrevista para el medio radial RPP Noticias.
Última llamada
Contra todo pronóstico, Juan no
puede quedarse de brazos cruzados y decide continuar con el emprendimiento
cultural por su cuenta, de manera virtual. Sin embargo, ¿los actores o artistas
recibieron el bono 600?, ¿existe algún subsidio provisional?
El bono universal familiar, lo
administra el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), y existen
algunos requisitos para formar parte de la gran lista de beneficiarios, estos
están publicados en el diario El Peruano. Decreto de Urgencia Nº052-2020.
-No estar inscrito en bonos
anteriores.
-Ningún integrante del hogar debe
estar registrado en alguna planilla del sector público o privado, excepto
pensionistas y modalidad formativa.
-El beneficiario no debe tener un ingreso superior a S/ 3 000 mensuales, de acuerdo con la información disponible en la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) y de la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat).
Al parecer los artistas
independientes encajan en la lista de los bonos que otorga el estado. Pero,
¿por qué aún no reciben el apoyo?, ¿qué soluciones propone el Ministerio de
Cultura para que el bono o algún estímulo económico llegue a los actores?
Y, ¿qué pasaría en el caso de los
actores independientes como Juan?
El Mincul presentó las bases para
la solicitud del subsidio, y la sorpresa fue que eran muy parecidas a las que
contiene la convocatoria “Estímulos Económicos Cultura 2019”, regresamos a los
tres obstáculos de Juan durante su travesía para postular a dicho proyecto. Un
círculo vicioso destinado a fracasar.
Juan y los actores independientes
se encuentran con proyectos desaprobados, sin bonos universales, sin embargo,
la función debe continuar.
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Por Laura Luján Naveda (09-11-1991)
Todos los caminos me llevan al arte, estudié Actuación en Buenos Aires, Argentina, bailo marinera norteña desde niña. En la actualidad, estudio Periodismo y medios digitales. Si no actúo, bailo; si no bailo, escribo, y si no, me reinvento.