DOLOR Y AFLICCIÓN
Cuando tú no estás a mi lado,
Se siente un dolor inmenso,
Más grande que la desesperación y la decepción,
Es una fuerza de desconsuelo,
Que se desplaza,
Con la velocidad del llanto y la aflicción.
Ya está oscureciendo,
Y con ella mi llanto empieza a caer,
Y es porque no he tenido respuesta a mi llamada.
Aúlla un perro allá a lo lejos,
Como un cantico del anochecer fúnebre,
Lleno de tiniebla y oscuridad.
La luna aún no ha salido,
Las nubes negras cubren el cielo solitario,
Y mi mente juega con tu recuerdo del ayer.
Acaba de salir una estrella al firmamento,
La veo fijamente y parece que dibuja tu hermoso rostro,
Estoy absorto con mi mirada puesta en ella.
Ahora, ya salió la luna y me da su claridad en todo mi ser,
Tengo ya los ojos empapados de lágrimas,
Quiero gritar y decirle al mundo de lo mucho que te amo,
Eres lo que yo más anhelo,
¿Y sabes mi amor?...
Eres mi mundo dibujado en el corazón de Dios.
Mi Amor
Mariam.
Mi amor, alegre roció del amanecer, dulce esperanza de mi
vida, quisiera estar para siempre en tu pensamiento, llévame en cada sonrisa
tuya, sea yo la felicidad de tus días, el despertar dichoso de tus mañanas, el
número de suerte de tus juegos del azar, la luz de tu lámpara mágica, el primer
y último rayo de luz que asoma a tu ventana…
Amor, quisiera que, siempre me miraras con tus ojos llenos de
felicidad, y jugar con el vaivén de tu dulce mirar, quisiera estar para siempre
a tu lado como el aire que respiras, como la almohada de tus sueños y como esa
monedita de medio sol en tu cartera, llévame siempre, aunque sea como un
recuerdo…
Amor, quisiera que me ames como la tierra a la lluvia, como la
flor a la mariposa, como la luna al sol, como la vida al amor, como los peces
al agua…
Amor, sé que nuestro romance vivirá para siempre en la
eternidad de los recuerdos, sé que el arcoíris pintará nuestras sonrisas, la
lluvia regará nuestro marchito corazón, sé que nuestro romance trascenderá en
todas las historias de los seres humanos para siempre…
TU PARTIDA Y MI DOLOR
Sentado en la nada a medianoche,
Y sin poder dormir,
Con el pensamiento puesto en ti,
Oigo el murmullo de las horas,
Que avanzan sin cesar
Y hacen doler mi corazón,
Como dardos punzantes…
Y ahora me encuentro vacío,
Sin tu presencia
nocturna.
Mi amor te fuiste como una rosa perfumada
Al silencio de la eternidad y los sueños
Donde moran los dioses del bien…
Siento el dolor en mi corazón y mi alma,
Me va ahogando y me deja sin aliento,
Mis ojos se cansaron de llorar,
Y se pusieron tristes,
Mis lágrimas volaron al infinito cielo azul,
Y mis labios se resecan sin tus besos de miel,
Ya no puedo estar feliz,
Mi sonrisa está de luto
Y voy muriendo todas las tardes
Como muere el sol en medio del mar…
Solo espero el mañana y la caricia del alba,
Viendo tus fotos, se estremece todo mi ser,
Recordando las horas tan bellas,
Que pase a tu lado, de felicidad y amor,
Acurrucado en tu regazo en días de lluvias,
Y saboreando cada parte tuya,
Los días de primavera,
Fantaseando Los placeres del amor
Y la alegría de vivir…
Henry Mauro
Huancayo-Perú